Transmisión especial
Transmisión especial
Familia
Esta relación desarrolló en el filántropo un carácter resiliente. A través de esta experiencia, forjó su temperamento y su capacidad para enfrentar desafíos sin temor.
10/04/2024 | 09:57
FOTO: Kimbal y Elon Musk con sus primos, Peter y Russ Rive.
La infancia de Elon Musk estuvo marcada por dificultades y experiencias traumáticas, incluyendo maltrato físico y psicológico por parte de su padre, Errol, y el acoso escolar.
A pesar de esta relación tumultuosa, cuando Musk tenía 10 años, tomó una fatídica decisión: irse a vivir con su padre a las afueras de Pretoria. Luego, su hermano Kimbal se unió a él. Aunque resultó ser una idea que lamentaría, esta decisión lo llevó a un lazo inesperado: sus primos.
La relación con Peter, Lyndon y Russ Rive, hijos varones de su tía materna, Kaye Rive, fue crucial para el magnate. Juntos vivieron aventuras en los años 80 que ayudaron a Musk a tomar decisiones sin miedo, demostrar su competitividad y dejar de ser un niño torpe y sin amigos. Así nació la “conjura de primos”, que lo acompaña hasta hoy, donde el riesgo es el principal combustible.
La biografía escrita por Walter Isaacson, titulada Elon Musk, profundiza en esta relación entre Musk y sus primos. Maye Musk, madre de Elon, se pregunta por qué eligió vivir con alguien que le causaba dolor. Sin embargo, ella no se quedó de brazos cruzados y se mudó cerca de ellos para que la familia estuviera más unida.
Los viernes, Maye pasaba a buscar a sus hijos para llevarlos a la casa de su abuela, Winnifred Haldeman. Allí, la diversión comenzaba cuando Elon y Kimbal pasaban la noche en la casa anexa a la de su abuela: la de sus primos. Maye era cómplice en sus travesuras, y aunque decía llevarlos a la iglesia, en realidad les permitía hacer sus planes.
Elon se ganó la reputación de ser el más intrépido de todos los primos: era competitivo y no toleraba trampas. Las peleas entre primos eran feroces e incluso con su hermano Kimbal.
El magnate fue así cómo desarrolló un carácter resiliente, además de una relación con sus primos que hasta el día de hoy sigue siendo un pilar en su vida. A través de estas experiencias, forjó su temperamento y su capacidad para enfrentar desafíos sin temor.
/Inicio Código Embebido/
Mirá también
/Fin Código Embebido/
Te puede interesar